La Magia Femenina vive en ti, y la aplicas de acuerdo a la calidad de energía que manifiestas... Es decir a la calidad de tus pensamientos, emociones y hasta de tu cuerpo físico (nivel de salud).
Estos tres aspectos son los que te impulsan o te limitan para alcanzar tu plenitud, tu felicidad, tu éxito y relaciones armoniosas.
La Magia esta viva y latente en cada célula de tu cuerpo, en la calidad de tus hormonas, en la grandeza de tus sueños y anhelos, en esa voz interna que te dice bajito qué es lo que mas te gusta hacer y hacia donde quieres caminar.
Ahí esta, a la espera de que tu la descubras y la manifiestes...que con cada idea que surge en tu mente, tu emoción genere en tu cuerpo toda la gama de químicos que te motivarán para realizarlos, para buscar, para organizarte, para ir acercándote cada día un poco mas a tu meta. Sin limites, sin ataduras que no se puedan manejar adecuadamente...
¡Esa magia vive en ti! Dios te hizo perfecta, con todo lo que necesitas para cumplir con tu misión de vida con tus anhelos, con tus sueños. Eres tan grande como tus sueños ¡no permitas que la “vida” o las circunstancias te los minimicen! TU ERES LA ÚNICA QUE PUEDE DECIDIR QUÉ QUIERES EN TU VIDA. Tu corazón te lo indica, tu cuerpo responde!
Sin embargo, vemos que esa grandeza a veces se opaca, es efímera, débil... nos han hecho creer que el hombre es el “sexo fuerte”, y aunque SABEMOS que no es así, una serie de factores y de condicionamientos sociales nos lo confirman, y nosotras lo aceptamos!
Les REGALAMOS nuestra magia a los demás, a la vida, a lo que esperan de nosotras... En el fondo si lo analizas damos todo ese poder en espera de ser VALORADAS, AMADAS o APRECIADAS... Pero no te sientas mal, es parte de nuestra historia femenina, es parte de la herencia que esta tatuada en nuestras células y conciencia de generación en generación. Pero hoy es justamente el momento de DECIDIR DESPERTAR LA MAGIA.
A nosotras nos toca, romper con todas las ataduras que nos han mantenido alejadas del equilibrio entre el yin-yang, las mujeres de hace unos años nos ayudaron a romper con las cadenas del sometimiento (en apariencia) y levantaron la voz para decir “somos iguales” y así lo quisieron mostrar... compitiendo con ellos, haciendo su trabajo (sin dejar el trabajo de mujer por supuesto) o sea que tenemos DOBLE TRABAJO... Y no se trata de eso SI somos SUPER-MUJERES pero no en el sentido que lo hemos manejado hasta hoy. NO hay competencia.
LAS MUJERES HOY BUSCAMOS EL EQUILIBRIO, EL COMPLEMENTO, LA PAREJA! Y para eso tenemos nuestra Magia personal.
Debemos conquistar ese lugar, no pelear por él!
Debemos seducir a nuestras relaciones, no competir con nadie!
Debemos mostrarnos a nosotras mismas que somos UN SER completo que desea COMPARTIR su camino con otro SER completo...
Y para eso, “el camino” empieza dentro de nosotras mismas, en despertar esa magia, en reprogramar a nuestra energía, en desvanecer (por arte de la ciencia-magia) las cadenas invisibles que nos someten y que nadie nos impone, nosotras las asumimos como nuestras...
Es un tema para reflexionar profundamente, ¿alguien te obliga a ser siempre la que “atienda” a la familia aunque todos trabajen fuera de casa por igual?
Ya no se obliga, las mujeres asumimos ese rol desde el inicio de la relación y lo convertimos en NUESTRO DEBER y no en nuestro privilegio.
En la mayoría de los casos donde ambos miembros de la pareja trabaja, sigue siendo la mujer la que limpia, cocina, atiende niños, etc. ¿Donde esta la igualdad?, y conste que no hablo como feminista, hablo de conciencia, es verdad que la mujer tiene los DONES para cumplir con la parte de servicio, de comprensión, de DARSE en una palabra y eso es maravilloso, sin embargo la diferencia radica en la CONCIENCIA, Es decir ¿Asumes lo que haces porque sabes lo que eso implica, lo valioso que es? O lo haces porque no te queda de otra?.
¿Cuando cocinas proyectas tu amor y tu alquimia en los alimentos o es solo un deber que cumplir?
La magia Femenina debemos manifestarla en cada momento de nuestra vida, es lo que le da sentido a lo que hacemos, pero también debemos PEDIR ayuda, es decir: “A mi me gusta cocinar y apapacharte, pero el fin de semana te toca a ti, ¿si mi amorcito?” (coqueta)
Conquístalo, sedúcelo y pide ayuda a cambio de la promesa callada de todo lo que puede ganar. Y si de plano no se le da eso de la cocina, pídele que te invite a comer fuera de casa. Tienes el privilegio de compartir tus cualidades femeninas con la familia, sin embargo también tienes el derecho de pedir descanso, ayuda, comprensión, apapacho, etc. Pero TU te la debes creer y después saberlo pedir.
Sigue leyendo la segunda parte...
SEDUCCIÓN EN EQUILIBRIO
